Aunque la empresa de Servicios Públicos de Santander, Esant, es nueva en el radar del poder del departamento, es una de las entidades con mayor proyección en la región, y los intereses que maneja no son ajenos a los de la clase política de Santander.
A poco más de dos años de su creación (mediados de 2013) la Esant ya tiene en su haber la ejecución de más de 60 proyectos relacionados con obras de saneamiento básico (acueducto y alcantarillado), recibió por designación de la Gobernación de Santander el mando del plan departamental de aguas, y maneja un promedio de presupuesto anual de $16 mil millones.
A dirigir esa empresa llegó el pasado 14 de enero Mónica Paola Monsalve Monroy, una ingeniera civil que antes de ocupar ese cargo fue asesora de infraestructura de las Unidades Tecnológicas de Santander, UTS.
Si bien Monsalve Monroy, además de haber estado en las UTS, tiene experiencia en el sector de los servicios públicos y de 2006 a 2011 estuvo en la Empresa de Acueducto, Aseo y Alcantarillado de San Gil, Acuasan, su nombramiento, según seis fuentes consultadas por La Silla, no solo obedeció a criterios técnicos, sino también a la cercanía que guarda con el representante a la Cámara de Opción Ciudadana Fredy Anaya y al senador liberal Jaime Durán.
Aunque La Silla no logró establecer relaciones directas entre Molsalve Monroy y los dos políticos de la región, excepto por la amistad que la ahora gerente de la Esant tiene en Facebook con Anaya, sí encontró que su periodo en Acuasan coincide con momentos en los que los actuales congresistas consolidaron su poder en San Gil.
Fue en ese espacio de tiempo que Durán reforzó su poder en ese municipio y tras llegar al Senado de la República (2006), logró que su fallecido hermano, Ricardo Durán Barrera, se convirtiera en el alcalde de San Gil para el periodo 2008 -2011; y fue precisamente en ese mandato que Fredy Anaya y su familia, a través de la empresa López Morales & CIA, se quedaron con el manejo de parte del negocio de aseo en San Gil, que les fue entregado por Acuasan.
“Conozco a los dos congresistas pero eso no quiere decir que yo sea cuota de ellos o algo parecido. Simplemente me enteré de la convocatoria, presenté mi hoja de vida y la Junta fue la que me eligió con base a mi experiencia”, aseguró Monsalve Monroy al ser consultada por La Silla.
Monsalve además estuvo en cargos relacionados con la supervisión y planeación de proyectos en Acuasan para la época en que se suscribieron controvertidos convenios con la Alcaldía de Floridablanca por $22 mil millones.
A 2013 había obras sin concluir pese a que aparecían terminadas en informes de obra, y en 2014 se decretaron incumplimientos de algunos de los contratos que se derivaron de esos convenios entre Acuasan y Floridablanca.
Para 2016 la nueva gerente tendrá un presupuesto propio de $20 mil millones, la dirección de una empresa cuyo objeto le permite incursionar en proyectos de energía, gas y telecomunicaciones, además de los de agua y alcantarillado, y la ejecución de obras como la del Acueducto Regional del Chicamocha, cuyo valor total está proyectado en $64 mil millones que provendrán del ‘Contrato plan’.