LA SILLA VACIA

En los últimos dos días  una serie de cuestionamientos sobre la administración del alcalde de Bucaramanga, Rodolfo Hernández, han salido a flote por el rasero que se está utilizando en la administración para definir el personal.

Aunque en campaña Hernández abrió una convocatoria para que todos los ciudadanos interesados en trabajar en la Alcaldía le hicieran llegar su hoja de vida con el fin de buscar entre sus perfiles a los nuevos funcionarios y contratistas, esa promesa se ha quedado corta.

Si bien, y según aseguró el jefe de gabinete de Hernández, Manolo Azuero (ex editor de la Silla Santander), esa política está en etapa de implementación y señaló que algunos de los nuevos integrantes del equipo de la Alcaldía han sido seleccionados a partir de esa base de datos,  personal cuestionado de la pasada administración volvió al ruedo.

La Silla revisó el portal único de contratación y encontró que en los 22 reportes que se han hecho de la vinculación de personal, ya hay un nombre que sonó en el cuatrienio pasado por escándalos.

Se trata del de Adriana Milena Sanabria Hernández, quien fue nombrada en un artículo de la Unidad Investigativa de Vanguardia Liberal, por ser una de las contratistas de la era de Lucho Bohórquez que obtuvo varios contratos de prestación de servicios sin presuntamente tener la experiencia ni la idoneidad para ejecutarlos.

Para el caso de los funcionarios de libre nombramiento y remoción, ha generado suspicacias el nombramiento de Lía Patricia Carrillo, quien es la subsecretaria administrativa de la Alcaldía y quien es afín, según tres fuentes que conocen la movida política en la ciudad, a la cuerda del diputado liberal Honorio Galvis.

Precisamente,según versiones de dos fuentes que están dentro de la administración, Lía Patricia ha enfrentado acusaciones de acoso laboral y es señalada de mover el personal a su acomodo. No obstante, la funcionaria señaló que las afirmaciones en su contra no son ciertas, e indicó que de los seis sindicatos que existen en la Alcaldía de Bucaramanga uno solo es el que se ha quejado de su labor.

"Yo me ciño estrictamente a la ley, el acoso laboral del que ellos hablan es porque se exigen cumplimiento de horarios y tareas y eso no es acoso laboral. Yo no muevo a nadie de los cargos, yo soy una subordinada y recibo órdenes y cuando ha existido traslado de personal todo está completamente soportado y con solicitudes de jefes de cada oficina", indicó.   

Al respecto, Azuero le dijo a La Silla que las personas que continuaron de la administración pasada no están en esos cargos por su procedencia política sino “porque saben del tema que están manejando”.  

Sobre la base de datos el jefe de gabinete indicó que esperan que esté en funcionamiento a mediados de febrero, para a partir de ella seleccionar los perfiles del personal,  en razón a que la mayoría de los contratos que se han suscrito solo son por 5 meses.

A ese escenario se ha sumado la contratación de Pedro Porras Porras como conductor privado de Rodolfo Hernández con honorarios mensuales de $4 millones.

Según la explicación que entregó la Alcaldía, el pago que recibirá es proporcional a sus funciones debido a que deberá acompañar todos los días al mandatario y a que si lo vinculaban directamente en la planta de personal, el salario aumentaría por el pago de horas extras, dominicales y nocturnos. 

Desde la administración de Hernández también se dijo que  el nuevo conductor cuando estaba en el sector privado recibía el mismo sueldo, y se aseguró que fue él el elegido porque era del círculo de confianza de Hernández y las autoridades habían recomendado que alguien con ese plus llegara a ese cargo debido a las amenazas que recibió el Alcalde.

Sin embargo, el tema de fondo está dado en que la Alcaldía de Hernández estableció un estándar para definir el pago de honorarios a contratistas que está basado en la experiencia y en el nivel académico de cada persona que se vincula.

Aunque, según lo reconoce la misma Alcaldía, esa escala no es de obligatorio cumplimiento, sí es el rasero que se está teniendo como punto de referencia para definir el valor de la prestación de los servicios del personal.

La Silla comparó los honorarios del nuevo conductor, que según los estudios previos de la Alcaldía debe tener estudios primarios para ser contratado, con los de los  abogados y profesionales de diferentes especialidades que se vincularán a la administración,  y encontró que la  diferencia en algunos casos es solo de $500 mil mensuales.

Nota de la Editora: Después de la publicación de este artículo, Lía Carrillo se comunicó con este medio y nos dio su versión sobre los señalamientos que le hacen. La actualización se hizo a las 4:36 p.m.

Comentarios - Cada usuario tiene la posibilidad de incluir solo tres comentarios
Vie, 2016-02-05 21:31
Un problema grave en la alcaldía es la falta de información. Actualmente solo se publican los eventos en la página de facebook "Ing Rodolfo Hernández Suarez" y en ocasiones no lo hacen con anterioridad. La entidad no posee página de Twitter y para estar actualizados toca seguir a Manolo Azuero y a uno que otro secretario. El sitio web, al igual que los sitios de algunas secretarías e instituciones están desactualizados. Aparecen imágenes desde la administración de Lucho Bohórquez hasta links de hace 4 años (ver la secretaría de educación). Si quieren construir un Gobierno Democrático y participativo deberían actualizar estos medios de comunicación para que la ciudadanía esté mejor enterada y tenga una mayor participación en los procesos.
Vie, 2016-02-05 16:12
Es de vital importancia que el jefe de gabinete del alcalde aclare los alcances de la información suministrada, no puede ser que se pregone algo en campaña y se realice lo opuesto en ejercicio de las funciones, cosas como estas ayudan a que la oscura batalla librada por diferentes sectores para ensuciar algo que apenas esta empezando tome fuerza entre quienes confiamos en un cambio.
Añadir nuevo comentario

Otros confidenciales recientes

Lunes, Marzo 7, 2016 - 07:17
1
8366
Esta es la imagen que está circulando en redes sociales y que pone en el sonajero presidencial al Procurador Alejandro Ordóñez.

En las últimas semanas el nombre del Procurador Alejandro Ordóñez Maldonado empezó a moverse más que de costumbre en el país.

Además de las imágenes que empezaron a circular en redes sociales preguntando sobre la aceptación que tendría su eventual candidatura a la Presidencia, los rumores sobre que ya estaría listo el fallo del Consejo de Estado que lo podría tumbar empezaron a tomar fuerza.

Con ese telón de fondo, La Silla supo que el alto funcionario está buscando acercamientos con la prensa regional, cuando por lo general su relación con medios locales no es muy cercana.

En el evento que tendrá lugar esta semana en Bucaramanga con todos los alcaldes de Santander y que es organizado por el ente de control que Ordóñez dirige, además de hacer su típica salida en rueda de prensa, el Procurador también dará entrevistas privadas.

De hecho Ordóñez estaría indagando por los medios con más rating y hasta estaría pensando en hacer una ronda para irlos a visitar, cuando por lo menos en los últimos cuatro años, no había hecho algo parecido en las regiones.

La inusual movida de Ordóñez le servirá en doble vía. Si el fallo del Consejo de Estado lo tumba podrá desde ya empezar a amortiguar los efectos de la decisión en su imagen; si lo que está pensando es en las presidenciales también le servirá de precampaña. Falta ver cuál de las dos es la que lo motiva más.

Viernes, Marzo 4, 2016 - 19:03
0
9652

Esta semana ocurrió un hecho que volvió a sacar a flote la crisis financiera que desde hace años atraviesa el Hospital Universitario del Caribe, en Cartagena. El diputado de Cambio Radical Manuel Berrio Scaff presentó una queja de 394 páginas ante la Procuraduría Regional de Bolívar por presuntos malos manejos en la contratación. También pidió la suspensión de la gerente Elga Ehrhardt Gutiérrez. Los problemas de infraestructura y el déficit financiero del principal hospital de Bolívar terminaron enfrentando a dos pesos pesados de la política bolivarense: los exsenadores condenados por parapolítica Vicente Blel Saad y William Montes, poderes detrás de Berrio y Ehrhard, respectivamente.

Manuel Berrio Scaff es un debutante en la Asamblea y miembro de una de las casas políticas más poderosas de Bolívar, en cabeza de su tío Vicente Blel. Mientras que Elga Ehrhardt Gutiérrez es una bacterióloga momposina que llegó en julio de 2012 a la gerencia del hospital, después de ganar un concurso de méritos. Aunque en la Cartagena política no es un secreto que tiene el respaldo del parapolítico William Montes.

El enfrentamiento entre Berrio y Ehrhard comenzó en enero pasado, cuando el diputado ingresó al Portal Único de Contratación para revisar los contratos de 2016 del hospital, pero solo encontró tres. Vía derecho de petición, le solicitó a la gerente copia de todos los contratos que hasta entonces, primera semana de febrero, hubiese firmado. El diputado recibió 44 contratos.

Tras revisarlos uno por uno, Berrio Scaff acusa a la gerente de haber fraccionado la contratación para evadir la convocatoria pública y adjudicar a dedo. El diputado asegura que solo, en enero, la gerente firmó 20 mil millones de pesos en contratos. Y que a todos les encontró irregularidades.

El diputado dice haber encontrado que tres proponentes de uno de esos contratos expidieron el mismo día y a la misma hora sus certificados de Cámara de Comercio. Lo que a su juicio prueba la estrategia de un mismo grupo de personas para mostrarse como tres firmas distintas. Berrio también denunció que varias de las pólizas fueron expedidas semanas después de la firma de los contratos, cuando por ley deben haber sido adquiridas antes de la firma.

Ante esas inconsistencias, Berrio citó a la gerente a un debate de control político el pasado 18 de febrero. Ese día, durante casi seis horas,  Ehrhard les explicó a los diputados el estado financiero del hospital y las condiciones en que esa institución terminó el 2015. Diez de los 14 diputados aprobaron el informe, uno no asistió y tres, incluido Berrio Scaff, se mostraron insatisfechos.

Tras ese debate y de terminar de documentar las inconsistencias que dice haber encontrado, el diputado Berrio Scaff redactó un extenso documento que le presentó este martes a la Procuraduría Regional de Bolívar.  Como contó La Caribe, esa entidad está en manos de Raúl Guerrero, un reconocido abogado y profesor universitario de Cartagena que es cercano al grupo de los Blel, dada su amistad con el concejal Vicente Blel Scaff, primo del diputado Berrio.

Aunque en la Cartagena política aplauden que el hospital vuelva a estar en la agenda política, no han faltado los que ven detrás de esas denuncias de Berrio intereses de su grupo político para presionar al gobernador de Bolívar Dumek Turbay por burocracia en su gabinete. Esto porque el hospital depende de la administración departamental y los Blel apoyaron a Turbay en las regionales pasadas, pero todavía no tienen participación en el equipo del mandatario liberal. Interpretaciones que el diputado Berrio le negó tajantemente a La Silla.

Las críticas a la gerente justo se dan en momentos en que el hospital suma pasivos cercanos a los 100 mil millones de pesos y por cuyas débiles finanzas el gobernador Turbay convocó, la semana pasada, a una reunión de emergencia, que contó con la presencia del ministro de Salud Alejandro Gaviria. Allí se despejó el fantasma del cierre y se prometieron acciones para sacar a la institución de la crisis.

Mientras las soluciones de fondo llegan y se conocen las consecuencias de lo denunciado por el diputado Berrio, los estudiantes de medicina de la Universidad de Cartagena iniciaron este lunes una asamblea permanente para exigirles a los gobiernos departamental y nacional mejores condiciones de infraestructura para el buen desarrollo de sus prácticas profesionales. Hoy, por ejemplo, no pudieron operar a varios de los pacientes porque en el hospital se agotaron las batas con las que las personas deben ingresar al quirófano, para no violar los protocolos de seguridad médica.

Viernes, Marzo 4, 2016 - 14:28
4
19270

Hoy llegó a la Corte Constitucional la demanda en contra de la ley que crea las Zidres, un esquema para hacer megaproyectos en la Altillanura. La presentó un grupo de congresistas del Polo y Alianza Verde que, por lo menos en otras cuatro ocasiones, han actuado en bloque  en diferentes instancias, las más visibles litigando ante la Corte.

El combo lo conforman los congresistas del Polo Iván Cepeda, Alirio Uribe y Alberto Castilla y por los lados de Alianza Verde, Inti Asprilla y Ángela María Robledo. Es decir, el grupo que conforma la izquierda más “política” y menos “económica”, y que se distancia tanto del liderazgo de Jorge Enrique Robledo en el Polo, como de los de Sergio Fajardo, Claudia López y Antonio Navarro entre los viejos verdes.

Como contamos a comienzos de febrero, el famoso frenazo que le puso la Corte Constitucional a los megaproyectos del vicepresidente Germán Vargas provino de una demanda contra el Plan de Desarrollo de Santos presentada por el mismo grupo.

“Ese bloque se creó en el Congreso”, explica un asesor cercano a uno de los congresistas “Los asesores jurídicos de todos tienen un chat colectivo y de ahí han salido las demandas”.

Pero la convergencia no se queda en esas demandas.

El 23 de febrero, ese grupo, más el antioqueño Víctor Javier Correa, envió una carta al procurador Alejandro Ordóñez para contarle de la visita de unos eurodiputados que querían hablar del proceso de paz y de la situación de Iván Cepeda.

Lo mismo hicieron en enero cuando le escribieron una carta al entonces Defensor del Pueblo, Jorge Armando Otálora, pidiéndole su renuncia. En ese caso también firmaron los verdes Angélica Lozano, Claudia López y Oscar Ospina.

Y es que la unión, si bien no tiene un propósito electoral explícito, va más allá de las demandas y sí puede llegar allá.

“Nosotros tenemos unas afinidades políticas que van más allá de las organizaciones a las que pertenecemos. Compartimos una posición sobre el proceso de paz, sobre el modelo económico. Pero que hayamos planteado una estrategia con algún propósito electoral, no” dice el senador del Polo, Iván Cepeda.

“El grupo está actuando junto en más temas, como lo de insistir en la negociación con el ELN” explica la representante Robledo. “Por ahora no tiene una pretensión de construir una precandidatura, pero si llega allá, en una convergencia con grupos del Verde, del Polo y de otros movimientos políticos o sociales, pues bienvenido”.

 

Páginas