Esta tarde, un juez de Cartagena dejó sin efectos la elección de la contralora distrital Nubia Fontalvo Hernández y le ordenó al Concejo devolver el concurso a la etapa de las entrevistas. Con esta decisión judicial, el alcalde Manolo Duque sufre a menos de mes y medio de mandato su primer gran golpe porque, por lo pronto, se queda sin la aliada a la que su grupo político puso para hacerle control fiscal.
La tutela que tumbó a Fontalvo fue interpuesta por el abogado Rafael Camargo Jiménez y coadyuvada por Iván Sierra Porto, miembro de la lista de elegibles a contralor. Ambos argumentaron que el Concejo de Cartagena violó el debido proceso en la elección porque la entrevista a los aspirantes debió hacerla la mesa directiva del Cabildo que se posesionó el primero de enero pasado y no la del que terminó periodo el 31 de diciembre.
Ahora la nueva mesa directiva tiene 10 días para volver a hacerles las entrevistas a Fontalvo y a Porto Sierra, consolidar los puntajes y votar una vez más para designar al titular de la Contraloría. Solo competirán ellos dos porque el tercer miembro de la lista de elegibles había renunciado días antes de la elección, que se realizó la primera semana de enero.
Como contó La Caribe, la abogada Fontalvo fue escogida por la gestión que hicieron el hermano del alcalde Manolo Duque, José Julián Vásquez, y el senador liberal Lidio García, quien respaldó la candidatura de Duque.
Fueron Vásquez y García quienes la noche del 7 de enero lograron cambiar la votación porque ese mismo día, por la tarde, los concejales habían decidido en reunión en un hotel de Bocagrande que el contralor sería el conservador Sierra Porto, según le contaron a La Silla dos políticos cartageneros.
Sierra Porto, hermano del exmagistrado Humberto Sierra Porto, representa una amenaza para el alcalde Duque porque es más afín al excandidato conservador Antonio Quinto Guerra, a quien el actual mandatario venció el 25 de octubre.