El Ministro de Defensa dijo el lunes por la mañana al presentar su renuncia que cree que el Presidente no va a ser candidato a las elecciones del 2010. “No tengo más elementos de juicio para hacer esta afirmación que mi intuición íntima, no es una información que el Presidente me dio”. ¿Es eso una señal de que Uribe no quiere un tercer mandato?
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Director, Fundación Liderazgo y Democracia
Significa que la posibilidad de que no aspire es alta, lo que hace obligatoria la pregunta ¿por qué entonces Uribe impulsa obsesivamente el referendo?
Porque sin la expectativa de su continuidad en el poder, no pasaría la reforma política y sería imposible recomponer la bancada parlamentaria en dos partidos, la U y Conservador. Y en medio de la actual división de las huestes uribistas, el Presidente no puede imponer un sucesor, ni controlarlo desde el Congreso.
Solo cuando consolide un partido mayoritario que pueda dirigir férreamente como ex presidente, Uribe renunciará a su arma secreta del referendo.
Consultoría política
Juan Manuel Santos lleva más de 12 años de aspirante a la Presidencia de la República. Su decisión no tiene que ver con ninguna señal del Presidente Uribe, sino con que nunca antes, había registrado los índices de favorabilidad e intención de voto que permiten la viabilidad de su candidatura. Lo lamentable es que al igual que le está pasando a Vargas Lleras, a Arias, y a otros, su candidatura quede en suspenso por el referendo. A un año de las elecciones, el país debería estar ya escuchando propuestas. Si de señales se trata, tenemos que ver son las que están mandando desde el Congreso. El proyecto reeleccionista no es solo para reelegir al Presidente, es un “combo” para reelegir a Uribe y a los congresistas “furibistas” por lo menos por 4 años más, y así mantener intactas sus clientelas regionales y cuotas burocráticas. No de otro modo se entiende la reforma política, que se están confeccionando para cerrar el acceso al poder político como no se hacía desde el Frente Nacional.
Ex congresista y ex facilitador de paz
No depende de él, pues en el fondo está condicionada por las normas a modificar que se lo permitan. Es un camino minado con minas antiuribistas, quiebrahonras y quiebraimágenes, de sus contrarios. Es una ruta difícil que solo la ciudadanía puede convertir en marcha segura de la nación, si sale el referendo y si no lo asesinan las guerrillas. Por lo tanto cuando dirigentes como Marta Lucía Ramírez, Andrés F. Arias o Juan Manel Santos ofrecen sus nombres para precandidatura, están situándose en el campo de batalla electoral para no dejar que vacíos coyunturales sean llenados por otras corrientes adversas. En esta etapa lo lógico es mantener claro el objetivo estratégico, la presidencia. Y la oposición está en lo suyo, con magistratura incluida, haciendo uso de los negativos tácticos que deterioren al Presidente porque pretende aspirar. Una forma maniquea de excluir el verdadero enemigo de la nación que desde la selva y debajo de los cultivos de coca, esboza una sonrisa letal.