Luego de que el presidente Juan Manuel Santos ordenara al equipo negociador del Gobierno en La Habana iniciar la discusión sobre un cese al fuego bilateral y definitivo, se abre un debate sobre la conveniencia de hacer esto antes de la firma de un acuerdo final. ¿Cuál es su opinión al respecto?
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Ex magistrado de la Corte Constitucional y ex candidato presidencial, Polo Democrático
El cese al fuego bilateral sería una señal muy promisoria, premonitoria de que el Acuerdo final es inminente. De hecho, sería un catalizador positivo para todo el proceso. Sin duda, soy partidario de que se dé.
Profesor de ciencia política, Universidad de los Andes
No me cabe duda de la conveniencia de un cese bilateral del fuego antes de la firma del Acuerdo Final, al menos desde dos puntos de vista.
En primer lugar, conviene desde un punto de vista humanitario al tener en cuenta los desastres provocados por la prolongación del conflicto armado en perdida de vidas. En segundo lugar, conviene desde un punto de vista político al considerar el estado en que se encuentran las negociaciones y los argumentos esgrimidos por quienes se oponen a ellas. De esta manera, se le daría mayor impulso al proceso y se le restaría credibilidad a tales argumentos.
Sin embargo, un eventual cese al fuego debería tener condiciones, como la de fijar términos entre las dos partes para la culminación exitosa de esas negociaciones.
Director de Protransparencia, Barranquilla
Mi interpretación es que si el Presidente se atrevió a ordenarle al equipo negociador que inicie con las Farc la discusión del cese al fuego bilateral es porque consideró que ha llegado el momento de ambientar ese paso trascendental. No creo que se atreviera a hacer ese anuncio tan audaz sin tener certezas basadas en información confiable. Ningún colombiano sabe más que Santos sobre cómo marchan realmente los diálogos. Si él no sabe, entonces quién.
Por supuesto, conviene que haya cese bilateral del fuego antes de la firma del Acuerdo Final, por varias razones: 1.Porque desarma los argumentos de quienes cuestionaban los diálogos que se cumplían en medio de los disparos. 2.Porque predispone al país a brindarle un sólido apoyo a la refrendación de lo pactado.3. Porque nos ahorramos en la víspera del acuerdo un montón de muertos y heridos. 4)Porque nos ahorramos también un poco de plata que diariamente se traga la guerra y que podría reorientarse a necesidades sociales importantes.
Ex investigadora del Centro de Memoria Histórica y del Cinep
El cese al fuego bilateral demuestra con suma claridad que tanto el gobierno como las FARC estan realmente comprometidos con la firma de un acuerdo de paz. Falta lo mas importante, el aval de los colombianos.
Ex consejera presidencial de Programas Especiales
NO. Si lo que pretendía el presidente Santos al compartir con los ciudadanos las instrucciones que le dio a los negociadores para "llegar cuanto antes al cese bilateral del fuego" era una vez más sentir el pulso de la gente, lo logró: la confianza no esta arraigada entre los ciudadanos para aceptar un cese al fuego bilateral sin antes haber llegado al punto donde todo este acordado, o sea, el acuerdo final. Hasta dónde conocemos ( que es poco ), aún existen muchas salvedades, lo que significa en lenguaje popular, que hay muchos puntos enredados, por ejemplo, entrega o dejación de armas.
No confiamos en unas FARC armadas así digan que pactan un cese al fuego.
Investigador, Fundación Paz y Reconciliación
Lo que más le conviene a Colombia y al proceso de Paz es el cese de la violencia.
El Presidente Santos, nos ha dicho que está dispuesto a discutir con las FARC, las condiciones para establecer un cese bilateral del fuego, lo cual es una extraordinaria noticia, que ayudará a una dinámica de mayor agilidad y trabajo en los puntos que faltan para cerrar las negociaciones.
Si las FARC, han decidido dar el paso de establecer un cese unilateral indefinido desde el pasado 20 de Diciembre, como una muestra de su compromiso con el cierre definitivo de su alzamiento armado, lo que corresponde desde el lado del estado es distensionar el conflicto y trabajar con las FARC, por acordar un cese bilateral y definitivo de la confrontación armada, donde las dos partes dan una enorme señal, a la sociedad Colombiana y al mundo, que los dos, están trabajando por transformarse de enemigos a socios para trabajar por implementar unas reformas, que están consignadas en la agenda acordada y que son el reto mayor, al buscar su refrendación ciudadana.
Por supuesto que lo más adecuado es establecer el cese bilateral, a la mayor brevedad, cuando se establezcan las condiciones, mecanismos y procedimientos para que las dos partes no choquen y se logre establecer una verificación idónea, partiendo que si las dos partes tienen voluntad y seriedad de dejarse de enfrentar, la base de compromiso es enorme y el reto será controlar a los que quieran sabotear y confundir con acciones, que vayan contra el cese bilateral.
Si el Gobierno del Presidente Santos y las FARC, liderada por TimoleónJimenez, han avanzado tanto, en este proceso, faltando el delicado tema del mecanismo de justicia transicional, si se logra el cese bilateral, se podrá dar este debate, sin los estruendos de la metralla y los bombardeos, y asumir el desarme de las FARC y la refrendación sin la violencia que tanto daño hace al proceso de paz y a la credibilidad del mismo, por todo lo anterior, esperemos que poco a poco el volumen de la guerra vaya disminuyendo como se ha sentido desde el pasado 20 de Diciembre y se establezca el clima de controversia civilizada, que es lo que buscamos al sacar la violencia de la política.
Ex Ministro de Gobierno y de Comunicaciones
Antes de la firma habrá desescalamiento. Y el cese bilateral definitivo ocurre cuando se firme el acuerdo final que da inició a la construcción de La Paz. Ese acuerdo final que implica el cese de fuego y de hostilidades no se puede discutir ni en un día ni en una semana ni en un mes. Es de una rara complejidad. Ya se viene discutiendo según nos informaron cuando le dieron ese encargo al general Flórez . Los temas pendientes se están discutiendo simultáneamente . Así nos lo informaron, también, hace varias semanas. Es apenas natural que , por supuesto, se incluya este tema. La esencia , la razón de ser , de las conversaciones es llegar al acuerdo que le pone fin al conflicto. Ese era el carácter distintivo de esta negociación. Así se planteó desde el principio.
Así de claro. Así de elemental. Así de obvio.
Coronel (r) del Ejército y profesor, Universidad de la Sabana
Por primera vez desde que se inició la negociación con las FARC el Presidente no habló de operaciones "ofensivas" contra las guerrillas. Esto estaría indicando que, al menos en el lenguaje, se inició el desescalamiento del conflicto en respuesta al cese unilateral indefinido de las FARC y otras señales como la entrega sin contraprestaciones del gral Alzate. También sería una actitud coherente con aquello de "acabar con la desconexión entre la mesa de La Habana y lo que pasa en el país".
Si así es conviene acordar otros aspectos estrictamente militares en la misma dirección para así ambientar el cese al fuego bilateral y definitivo que debe incluir ubicación especifica de las FARC.
Lo que no han entendido quienes se oponen, es que a quienes menos conviene la inactividad militar es a las FARC, cuya relevancia ha girado en torno a la violencia. El cese al fuego y de las hostilidades las obligaría a demostrar su relevancia solo en lo político y esto las obligaria a acelerar la firma de los acuerdos.
Investigador, PIK -Instituto Potsdam de Investigación en Cambio Climático (Alemania)
En el CD están desesperados. Como no existen argumentos serios para oponerse al cese bilateral, el senador Rangel apela a una fatuidad, y a la interpretación maníquea de la constitución.
La carta no dice en ninguna parte que las fuerzas DEBEN 'estar en operaciones' para cumplir su mandato. El artículo 217 reza: "Las Fuerzas Militares tendrán como finalidad primordial la defensa de la soberanía, la independencia, la integridad del territorio nacional y del orden constitucional".
De ahí no se infiere que un cese bilateral esté prohibido. Una negociación que lleve a la desmovilización de la guerrilla es una estrategia para la defensa de la soberanía, la integ... etc.
Basado en la inexistente prohibición constitucional, el senador pontifica una fatuidad: "cese bilateral nunca debe haber". En efecto el cese de acciones de la guerrilla debe ser monitoreado y verificado permanentemente. Pero también debe garantizarse que los sectores contrarios a la negociación dentro de las FFAA respeten el cese de hostilidades. De eso se trata el cese bilateral, y le conviene al país.
El costo político es nulo -a menos que el cese de hostilidades no sea real y que la verificación no opere. Por el contrario! Un cese bilateral efectivo creará confianza entre la población, que podrá disfrutar los beneficios de vivir sin conflicto armado. El cese bilateral es un camino expedito para la refrendación de los acuerdos.
Que el uribismo diga lo que quiera. Lo único que les sirve es guerra frontal o rendición incondicional; es decir, la perpetuación de la guerra. Pero ya no tienen chances, y el cese bilateral será un hecho.
Senador, Centro Democrático
Cese bilateral nunca debe haber. Lo que debe haber es un cese al fuego de las Farc unilateral, definitivo , irreversible y verificable. Las Farc deben concentrar sus hombres y sus armas en un sitio de la geografía nacional con verificación internacional para garantizar que no vuelvan a cometer actos de violencia ni contra la población ni contra el Estado.
Las Fuerzas Armadas no pueden parar sus operaciones pues estarían incumpliendo su mandato constitucional.
Investigador, Fundación Paz y Reconciliación
Hay tres argumentos. Primero, desde el punto de vista de los expertos, obviamente un cese bilateral sería lo mejor. La gente no entiende como se negocia en medio de las bombas, y esto generaría confianza. Segundo, desde el punto de vista de los procesos de paz, también es lo mejor. Estamos entrando a la recta final y se necesita crear gestos de paz, se tienen que mandar mensajes positivos para un referendo. Y tercero, esto mandaría un mensaje de unidad y de compromiso entre las Farc y el Gobierno con el proceso de paz.
Sin embargo, el costo político es muy alto. Porque lo que va a decir el uribismo es que eso es un "mini Caguán" y que las Farc pueden fortalecerse. El desgaste político es tan grande que frente a un referendo podría salirle mal al gobierno.