Desde 1989 no se contaba con una investigación que -teniendo en cuenta los datos en IPS y de expertos en el tema- permitiera establecer no sólo la cifra de abortos que se realizan en Colombia, sino también los lugares, la forma y las condiciones en que se adelanta esta práctica en nuestro país. Con la idea de ofrecer cifras reales y permitir tener una visión objetiva sobre el fenómeno en el territorio nacional, el Guttmacher Institute y la Fundación Oriéntame presentaron hoy una radiografía del aborto en nuestro país.
Según las cifras presentadas en el estudio, que es resultado de una investigación de dos años, en Colombia cada año ocurren 400.412 abortos inducidos y tan solo el 0,08 por ciento corresponden a los tres casos donde la Corte Constitucional permitió las Intervenciones Voluntarias de Embarazo (IVE). La mayoría de los abortos se siguen dando en la clandestinidad.
Estas y las otras cifras que contiene el informe se consiguieron por medio de encuestas a 300 Instituciones Prestadoras de Salud sobre admisiones para tratamiento postaborto y prestación de servicios de aborto legal y 102 encuestas a profesionales médicos y no médicos con conocimientos acerca de la prestación de servicios de aborto y postaborto. De esos 102, 47 eran proveedores de servicios médicos dedicados a la consulta en el sector público y privado y 55 eran profesionales de otros campos, entre ellos investigadores, analistas de políticas y defensores de los derechos.
Estos son algunos de los puntos más relevantes que se consignan en el informe y que se constituyen en el único registro reciente del tema en nuestro país. El Instituto Guttmacher fue designado en 2009 como Centro Colaborador para la Salud Reproductiva por la Organización Mundial de la Salud y Oriéntame se dedica desde hace 30 años a promover la salud sexual y reproductiva de las mujeres en Colombia.
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Aborto mÁs alto en BogotÁ
Se estima que en Colombia cada año ocurren 400.412 abortos inducidos. Esta cifra indica que cada año una de cada 26 colombianas en edad reproductiva tiene un aborto.
En el año 2008, la región de Bogotá habría tenido la tasa de aborto más alta del país (66 abortos por mil mujeres) y la región Oriental la más baja (18 abortos por mil mujeres). En las regiones Pacífica y Atlántica las tasas también son altas (54 y 52 abortos por mil mujeres, respectivamente). En la región Central se dan 24 abortos por cada mil mujeres.

El mÉtodo mÁs recurrente: el misoprostol
El aborto pasa por todo tipo de formas: desde las más seguras -por medio de métodos quirúrgicos- hasta los más peligrosos -por medio de golpes en el abdomen. Las mujeres pobres en zonas rurales recurren más a las parteras o lo hacen ellas mismas, lo que las pone en mayor riesgo.
La mitad de los abortos se realiza mediante el uso del medicamento misoprostol, que la Organización Mundial de la Salud incluye en su Lista Modelo de Medicamentos Esenciales para la interrupción temprana del embarazo. Sin embargo, pese a la alta eficacia y seguridad del medicamento cuando se usa correctamente, el inadecuado conocimiento sobre cómo y cuándo usarlo resulta en una alta tasa de complicaciones: 32 por ciento sangrado y aborto incompleto, mientras el riesgo de estas complicaciones baja al 10 por ciento realiza en una clínica. Como lo explicó La Silla Vacía, el misoprostol todavía no ha sido incluido en el POS y el Procurador Alejandro Ordóñez ha llegado a mentir sobre los conceptos positivos de éste para evitar su inclusión.
Las mujeres obtienen el misoprostol de diferentes fuentes que incluyen el mercado negro, las droguerías y los médicos. En las áreas rurales, las mujeres pobres tienen menor probabilidad de usar el misoprostol que las mujeres de mayores recursos.

“Casi dos terceras partes de las Instituciones Prestadoras de Salud que podrían prestar atención postaborto no lo hacen”, dice la investigación. Esta afirmación se sustenta en que mientras cada año un total de 132.000 mujeres sufren complicaciones debido a abortos practicados en condiciones riesgosas, solamente 93.336 de ellas reciben tratamiento en IPS. Ello en términos porcentuales se traduce en que un 33% de todas las mujeres que se han realizado un aborto ilegal sufre complicaciones que requieren atención médica. Pero un 21% de ellas, no recibe atención médica.

La proporción de instituciones que ofrecieron el servicio de IVE fue mayor en Bogotá (23%) que en las otras cuatro regiones (8-12%). Las barreras administrativas y el abuso de la figura de objeción de conciencia por parte de las instituciones han contribuido a que las IVE solicitadas hayan sido demoradas o negadas.

Los riesgos para las mujeres en estratos bajos
Las mujeres más pobres y que viven en zonas rurales son las que más sufren las consecuencias de abortos inseguros, pues no tienen acceso a un procedimiento de alta calidad. La proporción de mujeres que sufren complicaciones es mayor en la región Pacífica (40%) y menor en Bogotá (25%), mientras que las regiones Central y Atlántica tienen tasas muy cercanas al promedio nacional. (31-32%). De las mujeres pobres del medio rural que sufren complicaciones, casi la mitad no reciben tratamiento.


En Colombia se presentan anualmente 911.897 embarazos no planeados, lo que significa 89 embarazos no deseados por cada mil mujeres de 15-44 años.
Esta tasa es un 25 por ciento más alta que el promedio para toda América Latina y el Caribe. La tasa de embarazo no planeado más alta corresponde a Bogotá (113 por mil) comparada con las regiones restantes (que está entre 67 y 104 por mil). Cerca del 44 por ciento de estos embarazos termina en aborto inducido.
De acuerdo a la investigación, aunque cada vez es más alto el número de mujeres que utilizan anticonceptivos para evitar embarazos no deseados, todavía no hay suficiente información sobre el uso correcto de estos, ni se han diseñado estrategias para que se continúe el uso de anticonceptivos una vez iniciado. “Se requiere expandir el acceso a la anticoncepción de emergencia para evitar los embarazos no deseados y sus consecuencias”, recomienda también el estudio.



En la Sentencia y la interpretación acerca de las tres causales, en ningún momento se exige que la mujer, en caso de haber sido (vulgarmente hablando) violada, deba abortar. Es una decisión de ella sobre si establece la posibilidad de llevar a cabo el proceso del embarazo o no.
Todo, todo, absolutamente TODO, es una decisión de la mujer.
La decisión de abortar, no es una decisión tocante con las creencias o quereres de quienes no son los responsables de su educación y crianza. Pero el Estado y la sociedad si debe buscar solucionar las consecuencias del aborto en las mujeres e indiscutiblemente en las causas por las cuales se acude a tal practica. Una educación sexual que cubra a todos los estamentos en que se informe sobre los distintos métodos de planificación con el fin de que el acto de procrear sea consentido, en el que la relación sexual pueda disfrutarse sin trasladarle consecuencias a un ser indefenso que requiere amor, educación y atención por personas que estén en posibilidad de ofrecerlos. La religión es una concepción personal que no puede imponerse, menos cuando se basan en un texto, sobre todo el antiguo testamento plagado de actos irrespetuosos con la vida, como el de obligar a un padre a levantar la espada sobre su menor hijo o la muerte de dos poblaciones por no compartir sus conductas un ser superior.
400 mil abortos anuales de los cuales apenas 0.08% (320) caben en los casos permitidos por la Corte Constitucional exigen un debate serio sobre la legislación del aborto y el derecho de la mujer a decidir sobre su propio cuerpo por encima de lo que quieran imponerle partidos políticos, iglesias u otros particulares.
En este país donde abundan la paternidad irresponsable y las madres cabeza de familia deberían dejar de volcar todas las consecuencias de la reproducción en la mujer, quien no precisamente queda en embarazo por partenogénesis.
Que hacer cuando el corazón le gana a la cabeza.
No me gusta el aborto. Pero, soy consciente de lo que viene por atrás.
Cuanta gente joven -como yo- conoce amigos que le ha tocado hacerlo. Es que toca dejar la bobada. Este es un tema de salud pública.
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No está de más decir que el Misoprostol por barato se consigue por 100.000 pesos.
Y eso que ese es el Chino.....
No. El Dios que ud. menciona no está habilitado para determinar la política criminal de Colombia, un estado laico. Valga decir que en un estado laico los creyentes de ese Dios son libres de cumplir sus mandamientos no abortando jamás.
Gracias por compartir sus creencias. Pero entienda que no son las mías, ni las de mucha gente en este ancho mundo, y que por eso no pueden ser tomadas como base de las leyes de un estado laico, diverso y con libertad de cultos como Colombia. Saludos.
No venga aquí con estos ejercicios escolásticos absurdos.
La peor manera de fundamentar una posición es a través de la religión. La religión es un apego, un dogma y un sistema de creencias, que de acuerdo a quien las ponga a disposición, sirven para hacer cualquier tipo de acción (con tal de que los creyentes se crean el cuento, generalmente por temor a lo que les vaya a pasar por las amenazas impuestas). Además, con todo el sin número de religiones que existen en el mundo no se puede hacer a una en particular que sirva de guía para saber qué hacer o qué decir.
Recuerden hermanos míos que el Antiguo testamento nos enseña, que la sangre derramada es buena. Si matais egipcios bajo las olas del mar muerto, podeís matar cuantos fetos querais (Dios mandó matar a todos los primogénitos egipcios y era por una buena causa, por supuesto, por que el fin justifica los medios de Dios que no deben ser cuestionados). Todo está en la Biblia, hermoso texto, claro, escrito de mitos orientales y medio orientales de al menos unas 20 culturas distintas entre sí, hasta terminar compiliados por un genio de la narrativa como Juan.(SUGERENCIA: si los argumentos factuales no funcionan cite la Biblia: independientemente de cuál sea su posición ideológica, la Biblia siempre le servirá (sagrada lingüística, santa semiótica). Nota: no conteste con nuevas citas biblicas. 2. no vale la pena saturar este espacio con esta discusión 3. antes de replicar piense que ese tiempo puede usarlo en otra actividad interesante, como leer su Biblia o mejor La Celestina de F. de Rojas
Este habla como Yamhure en su columna altisonante contra el aborto, y a lo mejor también como Yamhure comparte el sauna, la amistad y las opiniones que publica con un asesino en masa como Castaño.
Una noticia excelente: Dios NO EXISTE.
Y si realmente "No matarás" fuera un mandamiento de la Ley de Dios, deberíamos darnos cuenta de que esa figura imaginaría, Dios, ha sido la causante de más muertes en el mundo. Matamos más por razones religiosas que por alguna otra.
La biblia también dice: "Le trajeron una espada, y Salomón dijo: -Empuña esta espada, corta al niño vivo en dos y dale una mitad a cada una"
EL EXCESO DE RELIGIOSIDAD ES INVERSAMENTE PROPORCIONAL A LA FALTA DE EDUCACIÓN Y MIENTRAS EL TEMA DEL ABORTO NO SE TRATE COMO UN PROBLEMA DE SALUD PÚBLICA ÉSTE SEGUIRÁ CRECIENDO TAL VEZ PARA BENEFICIO DE MÉDICOS Y PERSONAJES SIN ESCRÚPULOS, LOS PRIMEROS COBRANDO POR HACERLOS Y LOS SEGUNDOS PAGANDO PARA QUE LOS HAGAN.
Acerca de los métodos:
http://apps.who.int/rhl/fertility/abortion/dgcom/es/index.html
"Se ha demostrado que los métodos clínicos para el aborto en el primer trimestre son seguros y efectivos. Los regímenes que combinan mifepristona o metotrexato con una prostaglandina (como por ejemplo misoprostol) son más efectivos que la prostaglandina solamente."
No debemos hablar del aborto como derecho sino del derecho a decidir de la mujer. Al seguir, como erróneamente lo hacen varios grupos, insistiendo en la llamada "liberalización total del aborto", se construye una interpretación errónea acerca del por qué llevar a cabo esa práctica, pues así se induce a pensar que lo que se pide es exigir que en todo momento sea el aborto la práctica a seguir.
En cambio, si se recurre al concepto "derecho a decidir" se reconoce la facultad que tiene la mujer acerca de poder interrumpir o no un embarazo.
Más información (y de donde extraje lo anterior, con lo que me identifico) en: http://www.elespectador.com/impreso/opinion/columna-291581-un-debate-ser... Mauricio García Villegas: Por un Debate Serio Sobre el Aborto.
Sólo un conciso y breve comentario: más pruebas quieren de que en Colombia la ficción supera a la realidad, es decir, la falsa moralidad se superpone a las crisis sociales y sanitarias?