Perder es perder un poco
"No prometí nada, no compré votos, no hice fiestas", dice Nicolás Uribe, quién llegó a la Cámara a los 28 años y no pudo saltar al Senado.
La estrategia de la campaña estaba dividida en varias zonas en Bogotá. Por cuenta de los problemas en la Registraduría, Uribe aú no sabe donde faltaron votos.
"La desgracia puede traer suerte y la derrota produce humildad. Le permite a uno ver cosas que no ve cuando gana", dice Flórez, que es adepto a la filosofía budista.
Flórez seguirá trabajando con Sergio Fajardo, que la próxima semana se medirá en su primer debate presidencial.
"Yo trabajé con mucha convicción, me metí con mucho temple y denuncié lo que pasaba en el Meta". Carlina Rodríguez.
Venus Albeiro Silva calcula que sacó diez mil votos en Bosa, una localidad de Bogotá. Pero no le alcanzó.
La derrota es un duelo, una bofetada, una resaca. Incluso una revelación. Pero no es un triunfo. Perder elecciones no es ganar un poco, perder es perder, por cientos o miles de votos. Es volver el lunes siguiente a una sede de campaña fría y desierta; es recoger afiches que ahora parecen un mal chiste; es hacer cuentas de las deudas. Perder es quedarse sin empleo.
“Uno se lanza para ganar”, dice a La Silla Vacía Juan Carlos Flórez, ex candidato al Senado de Compromiso Ciudadano, la lista que promovió Sergio Fajardo. Según el último boletín de la Registraduría, Flórez obtuvo 8.848 votos cuando sólo resta por reportar el 6% de las mesas. Compromiso no alcanzó el umbral y por lo tanto todos sus pasajeros se quemaron.
“Uno contempla la posibilidad de perder, pero no lo espera”, dice Nicolás Uribe de La U, que quiso pasar de la Cámara al Senado y se quedó corto por más de cinco mil votos. Uribe mejoró su registro de hace cuatro años, cuando sacó 20 mil, pero no fue suficiente. Muchos lo daban como fijo en el nuevo Congreso.
Como también se daba por descontada la elección de Carlina Rodríguez, del Partido Conservador, que lleva 16 años en el Congreso – 12 de ellos en el Senado –, o de Venus Albeiro Silva, del Polo Democrático, que con el respaldo de varios sectores populares del Polo quería pasar de la Cámara al Senado. A Rodríguez le faltaron unos 12 mil votos y a Silva, más de diez mil.
Nicolás Uribe sigue atendiendo desde la sede de su campaña. Está ubicada en una de las tantas casas desocupadas que nadie sabe que existen, y que antes de ser demolidas se vuelven el cuartel general de un político. “Dígales que esto va a seguir abierto por el momento, mientras miramos a ver qué hacemos”, le explica Uribe a alguien de su equipo antes de atendernos. En la mano tiene varias hojas con una lista interminable de nombres. “Estoy devolviendo llamadas, dándole las gracias a la gente”.
Las llamadas que les hacen a ellos por estos días son lo más parecido a un pésame, mezclado con algo de humor y compasión. “Es como si se hubiera muerto alguien cercano”, explica Nicolás Uribe. Después alguien lo llama y Uribe bromea con él y le dice que le dé empleo.
“Yo voté por ti”, le dice una mujer a Juan Carlos Flórez. Habla, sonríe y sigue. Juan Carlos le da las gracias y le devuelve la sonrisa. “Es un gesto de solidaridad muy bonito de la gente”, dice.
“Cuando un empresario se quiebra, nadie dice nada”, dice Uribe, “pero uno se 'quema' y es un pendejo”. Flórez, por su parte, cree que en Colombia no existe una valoración del fracaso. Nadie puede fracasar ni equivocarse porque está mal visto.
Ambos coinciden en que la derrota tiene un lado positivo: el del aprendizaje y la pedagogía. Una experiencia de choque, como un chorro de agua fría en la cara. La escuela de la vida del político que se hace contar y pierde. Una historia que en tiempo de ganadores de elecciones no es noticia.
Lo que pudo ser y no fue
“Hablar de lo que pudo ser y nunca fue es la letra de un bolero”, dice Juan Carlos Flórez cuando se le pregunta por las razones del resultado. “No todo es causa y efecto. Lo hicimos de la mejor manera posible, y no me puedo quedar sentado pensando en eso. Asumo las responsabilidades y sigo”. Pero también, dice, debe reducir su dosis de ilusión y aumentar la de realismo.
Nicolás Uribe mira el mapa de Bogotá y se declara sorprendido. “No entiendo la votación que tuvimos en la ciudad, y tampoco puedo saber dónde fue que nos faltaron votos porque a estas alturas la Registraduría todavía no entrega esos resultados”.
Una de las críticas que le hicieron a Uribe después de la derrota fue no haber tenido fórmulas a la Cámara, que usualmente arrastran votos. “Me dicen eso, pero si yo hubiera tenido ‘cámaras’ me habría tocado invertir mucho más dinero”.
Carlina Rodríguez, por su parte, no sólo quiere explicaciones de lo que pasó, sino que quiere respuestas judiciales. “Voy a poner un abogado para entender esto. Fue muy raro lo que sucedió en muchas mesas, en Meta, en Cundinamarca. Hubo por ejemplo denuncias de urnas abiertas”.
Rodríguez tiene su fortín político en el Meta. En febrero pasado, algunos periodistas del departamento denunciaron que su campaña estaba enviando sobres con dinero en efectivo de regalo por el Día del Periodista.
“El tarjetón me mató”, dice Venus Albeiro Silva. “La gente que vota por mí es de estrato uno, dos y tres, y muchos de ellos no entendieron. Votaron por mi número y marcaron el logo del partido abajo, donde no era, o sólo votaron por mi número pero no por el partido”. Para Silva, la gente le pasó una cuenta de cobro a él por culpa de la administración de Samuel Moreno. “Mucha gente me decía, ‘Venus, yo voto por usted, pero yo no voto por el Polo’. Y claro, el voto quedaba nulo”.
Aumenta el desempleo
“Lo primero que hace un político cuando pierde es que se pierde, pero acá no estamos haciendo eso”, dice Nicolás Uribe. Ahora él piensa en las deudas que hay que pagar y en su futuro económico. El dinero que recibirá por la reposición de votos no le alcanzará para cubrir los préstamos que sacó, ya que no llegó a la votación que tenía proyectada.
Uribe está casado y no tiene hijos, lo cual, dice, le da cierta tranquilidad frente a la incertidumbre financiera. Por el momento apoyará la campaña presidencial de Juan Manuel Santos y después analizará algunas opciones y buscará trabajo. “Me echaron con un preaviso de cuatro meses”, dice Uribe y se ríe. En junio terminará su periodo como Representante.
Venus Albeiro Silva, que también es Representante, dice que se volverá un desempleado más. “Regresaré a lo mío, que es hacer teatro, trabajar en temas culturales”. Pero lo suyo también es la política, a la que piensa volver lanzándose el próximo año al Concejo de Bogotá.
Juan Carlos Flórez seguirá acompañando a Fajardo en la campaña presidencial, en la que tiene muchas expectativas a pesar del fracaso de la Selección Colombia. “Esta es una lucha de largo plazo. La política que hacemos es como una nueva tecnología. Toma tiempo entenderla”.
Por momentos, la charla se llena de silencios. Flórez sonríe y aprieta la boca como si todo estuviera dicho. Uribe juega con el celular y mira por la ventana. Abajo lo esperan sus asesores, su equipo de trabajo en el Congreso, que aunque no están en las listas de las noticias, también hacen parte del pabellón de 'quemados'.
POBRE VENUS PURAS PATADAS DE AHOGADO, INTENTA DARLE LA CULPA A LOS DEMAS DE SU MALA GESTION, Q PENA SEÑOR PERO NO GANO POR MAL GOBERNANTE...
Curioso el argumento del señor Venus Albeiro de su derrota ¿Pero entonces cómo hace el electorado feudal para votar por el PIN?
Y ojo, a esa pobre gente le toca cada tres años (sumando las locales) aprenderse logos nuevos: Convergencia Ciudadana, Colombia Democrática, Colombia Viva, Alas Equipo Colombia, PIN...
Yo creo que Flórez debe estar pensando por qué no se le unió a Peñalosa esta vez. La quemada de Uribe me pareció interesante. NO se puede seguir haciendo política desprestigiando a otro, en este caso al alcalde?? Samuel. Esa es la vieja forma de hacer política. Qué gran ejemplo nos dieron los 'Verdes' en la consulta, haciendo campaña juntos que es lo mejor, comprendiendo el gran valor de la unión, proponiendo, haciendo democracia.
Ese reciclaje que intenta Venus, ahora al concejo de Bogotá, muestra la falta de programación y su improvisación, tanto como su deseo de no dejar de figurar.
Uribe, relájate y fúmate un porro!!! JA!
Para quienes les interese he creado esta petición oline para apoyar la union de Sergio Fajardo a la campaña presidencial de Antanas Mockus "http://www.petitiononline.com/MF2010/petition-sign.html" les agradesco mucho a quienes deseen apoyarla que la difundan entre sus contactos, muchas gracias.
Eso lo debe decidir Fajardo, que fue uno de los grandes damnificados del domingo. No creo que su ego lo deje. El cree todavía que puede llegar a la presidencia en sus condiciones actuales. Mejor promovamos un un movimiento vía redes sociales de la candidatura de Antanas, motivando a los desanimados e indecisos y recogiendo votos de opinión. A recuperar la ética, la dignidad, la justicia y la equidad en nuestra nación!!!!!
Muy buen reportaje!
Todos son quemados, pero no es lo mismo sacar del congreso a la señora Rodríguez, representante excelsa de la clase política más corrupta y clientelista (recordemos a su familia inmediata, don Luis Hernando Rodríguez y doña Marta Catalina Daniels), que a personas como Nicolás Uribe que -aunque no comparto ni el 5% de lo que propone- tienen posiciones claras frente al manejo del país. Lo mismo si comparamos a Jaime Dussán con Juan Carlos Flórez.
Completamente de acuerdo con jaroleon. Y lo que dice Silva del tarjetón es muy cierto, es lo primero que hay que solucionar en las próximas elecciones. Era un tarjetón ridículo.
Totalmente de acuerdo con Marisa. También voté por Florez y aunque se quemó, no me arrepiento de mi voto, siento que tomé la decisión correcta, y le deseo los mejores éxitos en su carrera política.
faltaron algunos quemados que se creian fijos en la elección,como Jairo Clopatofsky y Jaime Dussán
Perro, tratamos de contactar a Dussán para este artículo, pero no fue posible hablar con él.
Espere y verà que perder es ganar un poco y que los políticos caen para arriba. Nicolás será más util en el ejecutivo y ojalà termine metido de lleno en el nuevo gobierno.
Nicolas Uribe se creyo el cuento. Lo mismo le pasa a Florez el sempiterno candidato a todo con un caudal electoral que quizas le alcance para edil. La diferencia entre estos creyentes es que el primero se cae para arriba.
Ese Venus es mucho malagradecido. Ahora le echa las culapas al partido.
Es increible que un pais de extrema derecha como Colombia, un gomelo facho como Nicolas Uribe se hubiese carbonizado. Y sobre todo siendo el mas mediatico del uribismo, el consentido de la prensa que le arrimaron el microfono y la camara para todo en los 4 ultimos años, panelista semanal de Hora 20, etc.
No entiendo su calcinada, por su millonaria espectacular campaña, un mes antes de las elecciones, tenia cuñas en las mas importantes cadenas radiales, transmitidas nacionalmente en horarios de mayor sintonia, etc, etc.
Dificil creer que ahora Nicolas Uribe se las quiera hacer pasar de 'la pobre viejecita que no tiene nada de comer'. El es icono del estrato 10 y representa sus intereses, por eso me cuesta trabajo creer que a el no lo hubiera apoyado la ANDI, ASOBANCARIA, FENALCO, FEDEGAN, ARDILA LULA, SANTO DOMINGO, etc.
Vamos a tener que hacerle una colecta o vaca al ahora humilde ex congresista.
El artículo refleja la decepción y la impotencia que uno siente al perder. No sólo pierde el candidatio, sino todo el equipo de trabajo que durante meses se comprometió a una causa para sacar adelante ideas frescas - sin maquinarias, sin politiquería y sin compra de votos, -con trabajo hecho a puro pulso, intenso, comprometido. Yo trabajé en una campaña política como diseñador durante 4 meses pero tampoco funcionó, a pesar de tratarse de una de las más novedosas y originales en Bogotá (sin auto-echarme flores, jejejeje) Ahora estoy buscando trabajo, a pesar de que esta semana de depresión post-elecciones me ha dado un aire nuevo para pensar en nuevos proyectos, ojalá no relacionados con la porquería de política que se maneja en el país y que nos toca vivir. Afortunadamente hay quienes se salvan como los del Partido Verde, Juan Lozano (aunque no me aguanto La U), ideas jóvenes como Rodrigo Lara (aunque no comparto el bochornoso incidente que protagonizó en Corferias) y Simón Gaviria.
Los politicos no tienen muchos problemas cuando se queman. En el caso de Nicolas Uribe, seguro que se reencaucha con Juan Manuel en algun cargo. Lo que si es cierto es que en Colombia no existen segundas oportunidades, el fracaso no tiene redencion.
Buen artículo. Se lee de maravilla. Cubre casi todo el espectro político de los quemados, desde el polo hasta el partido conservador. Sin embargo, me quedé pensando en los quemados de ese otro pabellón siniestro: el Pin. Cómo manejan ellos la derrota? De manera tan cívica? Pido una nota sobre los quemados de los partidos que son pura maquinaria, candidatos sin rostro que son portadores de la antorcha de presos o simples delincuentes.
Que buena nota, es bueno conocer el otro lado de la moneda, el de los quemados.
gracias, cesadbe. No a todos los 'quedamos' les gusta hablar de esto. Uno que otro prefirió sacarle el cuerpo a La Silla. Saludos
No hay nada más delicioso que ver a un uribista al que el uribismo NO LE PAGA.-
NO LE PAGA????, SU MERCED... INCREIBLE QUE AÚN EXISTAN PERSONAS QUE CREEN QUE A UN PERSONAJE COMO ESTE NO LE PAGAN. Suficiente con que tengamos que pagarle nosotros en el Congreso y en los diferentes negositos que realiza a costillas de su fuero...
Francamente, resulta emposible no compartir la felicidad del Comentador Mamerto.
Si hombre, lástima por juan Carlos, exelente persona. El resto... Menos mal no entraron, por que, cada uno en su estrato, Venus, Nicolas y Carlina, son un veneno para la política.
Excelente reportaje. Un reportaje! gracias a Dios!
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