Descripción:
En este artículo se estudian ciertas formas de violencia ocurridas en la conquista de Antioquia entre 1540 y 1550. Como esta provincia era zona de frontera, tanto por resistencia aborigen como por la confrontación que existía entre las gobernaciones de Popayán y Cartagena, la guerra y los castigos contra los indígenas tuvieron características grotescas, incluso para el contexto de la Conquista. No se trata de estudiar la singularidad de Antioquia, sino todo lo contrario: mostrar que la guerra de frontera era un problema imperial, y cómo en ella se relajaba la moral, permitiendo un sistema punitivo extraño a las confrontaciones civilizadas, pero válido en zonas periféricas.